Soberanía, “baluarte sagrado que se defiende con la propia vida”: mensaje en el 138 aniversario de los Niños Héroes

El 138 aniversario de la Gesta Heroica de los Niños Héroes de Chapultepec se convirtió en un momento de reflexión sobre la soberanía nacional, con la presencia de la presidenta Claudia Sheinbaum y el mensaje solemne del secretario de la Defensa Nacional, Ricardo Trevilla Trejo. Durante la ceremonia en el Altar a la Patria, el titular de la Sedena recalcó que la soberanía es un “baluarte sagrado que se defiende con la propia vida si fuera necesario”, evocando el sacrificio de los seis cadetes que en 1847 dieron su vida frente a la invasión estadounidense.
Como orador único del acto, Ricardo Trevilla Trejo aseguró que nada apartará a las Fuerzas Armadas de sus misiones fundamentales: defender la independencia, la integridad y la soberanía del país. Subrayó que la lección heredada por los Niños Héroes obliga a mantener viva la defensa de la libertad y el patriotismo.
En su intervención, también hizo un reconocimiento público a la Secretaría de Marina-Armada de México, institución que, recordó, ha contribuido a lo largo de su historia en la construcción y fortalecimiento de la nación. “Hablar de la Armada de México es hablar de patriotismo”, expresó, puntualizando que este homenaje lo realizaba a nombre de soldados, pilotos y guardias nacionales.
El secretario de la Defensa destacó que la hazaña de los Niños Héroes de Chapultepec, así como la de los cadetes del Colegio Militar y de la Heroica Escuela Naval Militar, dejó como enseñanza que la soberanía nacional es un bien superior que exige sacrificios. Bajo esa premisa, insistió, corresponde a las nuevas generaciones seguir construyendo la libertad y fomentar el patriotismo en la vida pública del país.
Su discurso, dirigido a la presidenta Sheinbaum y a todo el pueblo de México, enfatizó la identidad popular de las fuerzas armadas: “surgimos del pueblo, pertenecemos al pueblo y servimos a ese mismo pueblo”. Con ello, refrendó la visión de las instituciones castrenses como pilares de la unidad nacional.
La ceremonia tuvo como escenario el Altar a la Patria, ubicado en Chapultepec, un monumento erigido en memoria de Juan de la Barrera, Vicente Suárez, Francisco Márquez, Fernando Montes de Oca, Agustín Melgar y Juan Escutia, los seis cadetes que en 1847 fueron inmortalizados como símbolos de la defensa de México.
La presidenta Claudia Sheinbaum encabezó la ceremonia, pasó lista de honor a los héroes y, tras pronunciar sus nombres, un coro de cadetes del Colegio Militar y de la Escuela Naval respondió al unísono: “Murieron por la patria”.
Finalmente, la mandataria colocó una ofrenda floral en el monumento, donde cada uno de los seis nombres quedó grabado en los pilares que conforman el recinto, reforzando el mensaje de respeto y memoria histórica.
El acto contó con la asistencia de la mayoría del gabinete legal y ampliado, además de representantes de los tres poderes de la Unión. Estuvieron presentes la presidenta de la Cámara de Diputados, Kenia López Rabadán, la presidenta del Senado, Laura Itzel Castillo, y el presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, Hugo Aguilar Ortiz.
Este último hecho marcó un momento simbólico, ya que fue la primera vez en varios años que la Suprema Corte participó en la ceremonia, reforzando el carácter de unidad nacional y la relevancia del evento en el calendario cívico de México.
El secretario de la Defensa Nacional aprovechó la fecha para subrayar que las fuerzas armadas, bajo el liderazgo de la presidenta Sheinbaum, seguirán fortaleciendo el sentimiento nacional todos los días. Con ello, dejó claro que el papel de las instituciones militares no se limita a la defensa territorial, sino también a la promoción de valores como la unidad, el servicio al pueblo y el compromiso con la nación.
Este mensaje cobra relevancia en un contexto donde las fuerzas armadas han sido objeto de debates y cuestionamientos. Al destacar la importancia de la soberanía como un valor sagrado, la Sedena y la Marina reivindican su papel como guardianes del Estado mexicano y continuadores del legado de los Niños Héroes.
La conmemoración del 138 aniversario de la Gesta Heroica de los Niños Héroes no solo evocó la memoria de los cadetes que dieron su vida en Chapultepec, sino que reafirmó la vigencia de los valores que representan: soberanía, libertad y patriotismo.
Con la presencia de la presidenta Claudia Sheinbaum, el respaldo de los tres poderes de la Unión y el mensaje de unidad del secretario de la Defensa, el acto se consolidó como una expresión de identidad nacional.
La frase central —“la soberanía es un baluarte sagrado que se defiende con la propia vida”— resuena como recordatorio de que la historia de México sigue marcando el rumbo de su presente y futuro.
La Verdad Yucatán